Quiere comprar, vender o importar un vehículo? Déjenos ayudarle.
A menudo se importan vehículos alemanes a España.
Por un lado, porque muchos ciudadanos alemanes se trasladan aquí y quieren llevarse su coche, que podría ser su caso, o también porque los coches en Alemania son generalmente más baratos y están mejor equipados.
Pero, ¿qué hay que tener en cuenta?
1 – El coche debe estar en su estado original: No debe estar rebajado, ni tener instalados estribos adicionales, que no hayan sido registrados por la ITV, etc.
Esto significa que, aunque el vehículo haya sido homologado por la ITV en Alemania, no significa que también vaya a pasar la inspección de la ITV en España, ya que aquí la normativa es algo más estricta.
2 – Costes de importación: En relación a los costes de importación, tenemos que tener en cuenta las siguientes cosas:
En primer lugar, tenemos unas tasas fijas de unos 200-300 euros en la ITV y en la DGT.
Además, si no se dispone del documento COC, habrá que solicitarlo, lo que puede suponer un coste adicional de unos 200 euros.
Por último, hay que pagar el «impuesto de matriculación», que aquí en España depende del precio de venta de catálogo, el año de fabricación y las emisiones de CO2 del vehículo.
Por ejemplo, este año he querido matricular un BMW X5, fabricado en 2016, cuyo impuesto de matriculación me habría costado más de 2500€, mientras que, por ejemplo, los vehículos híbridos o todos los vehículos que tengan unas emisiones de CO2 inferiores a 120 gr/km pueden importarse gratuitamente, lo que significa que solo pagaríamos los costes fijos de 200-500€.
Al comprar un coche de segunda mano en España, hay que pagar un impuesto de tranmisión del 4%.
Por ejemplo, si compramos un coche de segunda mano por 20.000 euros, tenemos que pagar un impuesto de compra de 800 euros para volver a matricular el vehículo.
Puede no parecer mucho dinero, pero si compramos un coche por 50.000 euros, tendríamos que pagar un impuesto de 2.000 euros.
Entonces, ¿qué podemos hacer para evitar este impuesto?
Para evitar pagar el impuesto de transmisión o de compra, podemos comprar nuestro vehículo en el extranjero. Al principio puede parecer un poco complicado comprar un vehículo en el extranjero y luego importarlo, pero en muchos casos merece la pena.
1º – Los vehículos en el extranjero, especialmente en Alemania, suelen estar mejor equipados y mucho mejor mantenidos que en España.
2º – Los vehículos en el extranjero son mucho más baratos. En algunos casos podemos ahorrar hasta 10.000 euros.
3 – La matriculación o «importación» (excluidos los gastos de transporte) sólo cuesta 200 euros en el caso de vehículos eléctricos o híbridos.
4 – No tenemos que pagar el impuesto de transmisión, ya que compramos el vehículo en Alemania y lo volvemos a matricular allí.
Así que en muchos casos realmente merece la pena comprar nuestro vehículo en el extranjero: Mejor, más limpio y más barato.
Así que si está interesado en importar un vehículo, póngase en contacto con nosotros.
Vor Allem, auf der Insel ist es sehr lohnenswert ein Elektrofahrzeug oder ein Plug-in-Hybrid zu besitzen.
Sobre todo, en la isla merece mucho la pena poseer un vehículo eléctrico o un híbrido enchufable.
Desde la incorporación de la Directiva europea Bolkestein, los gobiernos se han visto obligados a evitar el uso de licencias siempre que sea posible.
Esto también se aplica a la instalación de una estación de recarga. Entonces, ¿qué tenemos que hacer para poder instalar una estación de recarga?
Como inquilino: Como inquilino, puedes instalar fácilmente una estación de recarga en cuanto tu casero te dé permiso.
Como propietario de un inmueble que forma parte de una comunidad de vecinos: Debe notificarlo por carta al presidente de la comunidad. La comunidad no podrá denegar la instalación en ningún caso.
Como propietario de una vivienda unifamiliar: Puede instalar la estación de recarga sin más solamente siendo necesaria la comunicación al gobierno.
¿Y los costes?
El coste de la estación de recarga en sí ronda los 500-800 euros.
La instalación puede costar varios miles de euros, pero, como ya he dicho, está subvencionada por el Estado, por lo que los costes suelen ser inferiores a 1000 euros.
En total, pagas una media de 1500-1800 euros.